
Prótesis Dental. Cuando no es posible solucionar las ausencias dentales con puentes fijos, se pueden reponer los dientes ausentes confeccionando estos aparatos -conocidos como “de quitar y pon”- que, aunque son más incómodos que las soluciones fijas, son más económicos.
Tipos de Prótesis dental en Sevilla

Prótesis Dental Removible, tanto completas, prótesis parciales y prótesis esqueléticas, constituyen una solución más económica para la ausencia de piezas dentales. Este tipo de prótesis elaboradas con los más altos estándares de calidad por nuestros laboratorios dentales, siguen siendo muy habituales en la odontología actual. Aunque el paciente siempre intenta gozar de algún método de anclaje para evitar molestias a causa de pequeños movimientos o dificultades de adaptación.
Colocación y retirada de la prótesis
Recuerda siempre que se trata de ir adquiriendo la suficiente habilidad con los dedos, tanto para colocártela como para
retirártela, y esto será cuestión de varios días. Trata de colocar los ganchos de sujeción, si los hay, sobre las piezas remanentes presionando con los dedos hasta quedar fija y bien encajada. Pero no debes morder para colocarla ni forzarla. Con ello podrías romper un gancho de sujeción, o lastimar la mucosa. Es muy importante atender con la máxima atención las instrucciones de nuestro dentista a cerca del uso y mantenimiento de la Prótesis Dental. Solo así conseguiremos una perfecta adaptación y una mayor durabilidad de la misma.
Coronas dentales
Conocidas tradicionalmente como “fundas”. Cuando un diente está muy debilitado o es necesario reponer otro se puede recurrir a este tratamiento. Otros tipos de prótesis están compuestos por sistemas mixtos fijos/removibles. Las prótesis fijas son prótesis que toman apoyo únicamente en los dientes.

Con este tratamiento hay que tallar o desgastar las piezas adyacentes que harán de sostén del puente protésico en cada extremo de las zonas a rehabilitar.

¿En qué consiste el tratamiento?
En la primera visita el dentista tomará unas medidas de ambas arcadas para la confección de lo que llamamos “coronas provisionales” para que una vez que se le practique el tallado de las piezas a desgastar, evitemos tener los pilares al aire, lo que produciría una enorme sensibilidad y riesgo de rotura de los mismos.
Una vez recibida desde el laboratorio, la estructura metálica en la que irá montada la porcelana se hará en una tercera visita lo que llamamos la prueba de estructura. En esta prueba el profesional revisará y validará o no los ajustes necesarios para evitar que se produzcan en un futuro posibles caries en los pilares de sujeción.
Una vez validada esta prueba y, en una última visita, se coloca la funda y se ajusta la oclusión.
Período de adaptación
Lo más habitual es que termine, tras dos o tres semanas, con la completa adaptación a la Prótesis Dental de tal manera que olvidará que las lleva puesta. Para ello es fundamental acudir a las citas de repaso o adaptación y nunca perder la paciencia, ya que se trata de un aparato que nos hará llevar una vida absolutamente normal, que es lo que buscamos. El período de adaptación al uso de una prótesis dental va a variar según el caso y según las personas. Se trata de una aparatología que introduce un factor de fuerzas sobre hueso, mucosa y piezas dentales en la cavidad bucal.
Las primeras sensaciones son extrañas notándose una sensación de “boca llena” pero irá disminuyendo en muy pocos días.
Las dificultades de pronunciación momentáneas son muy normales en los primeros días de adaptación, ya que la lengua tendrá que habituarse a la presencia de un cuerpo extraño en el mismo espacio en el que antes se movía sola. Una buena ayuda será pasar unos ratos de lectura en voz alta. Esto ayudará a la lengua a ganar la habilidad necesaria.
Especial cuidado con no morderse. La lengua y la mejilla suelen ocupar los espacios en donde faltan piezas, por lo que necesitan unos días para acostumbrarse. Te recomendamos que muerdas con mucho cuidado al principio, hasta ganar confianza. Comienza primero comiendo alimentos blandos y que no sean muy untosos, y después alimentos cada vez con más consistencia. Si tuvieras algún mordisco accidental, utiliza un colutorio (enjuague oral) o algún tipo de gel calmante.
Disminución del sentido del gusto, aunque se recupera posteriormente, a medida que nos acostumbramos a comer con la prótesis.
Es habitual que en los primeros días de adaptación a la prótesis dental notemos que salivamos más de lo normal. No hay que preocuparse porque esto te sucederá sólo los primeros días, hasta que se normalice su uso.
Tanto la encía como los dientes, cuando quedan piezas remanentes, se han de acostumbrar a recibir nuevas fuerzas, sobre todo al comer o simplemente al cerrar la boca, pero como el resto sensaciones, desaparecerá en unos días.
Muy importante: si ves que te hace herida al morder, no dejes de acudir a tu doctor para que te repase la prótesis y contribuir así a su mejor adaptación. En la mayoría de las ocasiones, estas visitas de revisión se consigue acortar notablemente el periodo de adaptación.
Mantenimiento de tu prótesis dental
Quítese la prótesis dental antes de acostarse. Con ello descansarán las mucosas y encías. Introdúzcalas en un vaso con agua y una pastilla desinfectante especial para prótesis. Masajee sus encías, ello favorece el riego sanguíneo y puede evitar que aparezca reabsorción. Es aconsejable que dé masajes en las encías para mejorar su riego sanguíneo y prevenir en lo posible su reabsorción.
Debemos limpiar las prótesis dentales tras cada comida utilizando para ello un cepillo dedicado a ello, que puedes adquirir en cualquier farmacia. Utiliza un poco de jabón o incluso un poco de pasta de dientes.
Especial atención a las partes en contacto con piezas remanentes, como los resortes o ganchos que sujetan la prótesis para evitar caries en dichas piezas. Utilizar un bastoncillo con alcohol hasta abrillantar las partes metálicas. Si las limpias y no les sale brillo, es que tienen placa bacteriana que es la que crea las caries. Insiste en este detalle.
Muy importante limpiar con seda dental las zonas a las que no llega el cepillo, usando después un enjuague bucal que lleve flúor. Con ello podemos evitar las caries interdentales.
En resumen, acude a la consulta ante cualquier dolencia para evitar ulceraciones en las encías. De todas formas, debes ir a revisión con tu dentista cada seis meses para revisar el estado de las mucosas y el posible cambio en la posición de los dientes remanentes. Si es necesario, se puede proceder al reajuste de la prótesis mediante rebase y activación mecánica de los resortes de sujeción.